Pese a empezar perdiendo por 18 puntos, el equipo de Cincinnati consiguió coronarse como campeón de la AFC y representarla en el Super Bowl.

Por: Andrea Bonilla Blesa

La final de conferencia de la AFC vio un encuentro entre los Kansas City Chiefs y los Cincinnati Bengals. El partido fue una historia diferente en cada mitad.

Primera mitad: Dominio local.

Durante los primeros dos cuartos del encuentro, únicamente uno de los equipos parecían haberse presentado a jugar. Los Kansas City Chiefs estaban aplastando a su rival tanto a la ofensiva como a la defensiva, y no parecía haber modo de que los Cincinnati Bengals pudieran competir.

Tras sus primeras tres posesiones, el equipo local había anotado 21 puntos: un pase de anotación a Hill, otro a Hardman, y uno más a Kelce. Tanto por tierra como por aire, la ofensiva de los Chiefs se veía imparable.

Pese a tener todas las condiciones en su contra, los Bengals no bajaron los brazos, y un poco de ayuda por parte de los Chiefs les ayudó a meterse al juego.

Al acercarse el final de la primera mitad, los de Kansas City avanzaron rápidamente para ponerse en posición de agrandar a ventaja. Sin embargo, con cinco segundos en el reloj y sin tiempos fuera, decidieron ir por siete en vez de patear un gol de campo. Los Bengals detuvieron a Hill y abrieron el camino para un regreso.

Segunda mitad: Esfuerzo Bengalí.

Lo que haya decidido decirle Zac Taylor a su equipo durante el medio tiempo funcionó: iniciaron el tercer cuarto de forma inspirada. Detuvieron a los Chiefs en varias posesiones consecutivas, interceptaron a Mahomes, y anotaron lo suficiente para no solamente conseguir el empate, sino incluso alcanzar una ventaja de 3 puntos.

Evan McPherson, con un gol de campo de 52 yardas, puso a su equipo en la delantera con un marcador de 24-21, quedando alrededor de cuatro minutos en el reloj.

Final de película

Nuevamente, el resultado del encuentro se definió en tiempo extra. Harrison Butker empató el encuentro segundos después de que Mahomes sufriera un balón suelto que pudo haber resultado catastrófico. Con un gol de campo de 44 yardas, los Chiefs lo empataban 24-24 para irse a overtime.

Por segunda semana consecutiva, los de Kansas City ganaron el volado. Patrick Mahomes y compañía tomaron el campo con la esperanza de anotar un touchdown y ganar el encuentro. Sin embargo, no funcionó así. Jessie Bates y Von Bell hicieron una cobertura perfecta a Tyreek Hill y consiguieron la segunda intercepción Bengalí del día.

De esta forma, Joe Burrow tomó el campo, acompañado del resto de su ofensiva, y dejó el balón dentro de la zona roja para darle a Evan McPherson la oportunidad de ser el héroe de la noche. Y lo fue, con un intento de 31 yardas, selló el resultado. Los Cincinnati Bengals ganaron 27-24.